Involucrar a los aprendices: el desafío eterno para los formadores. Desafortunadamente, el compromiso con la formación no es solo intrínseco. Factores externos pueden motivar o desanimar a un aprendiz a invertir en su aprendizaje.

Los formadores tienen varias herramientas para captar la atención de los aprendices. Hoy en día, las herramientas digitales son muy populares. Además, la tecnología digital resulta ser eficaz para involucrar activamente a los aprendices.

Este artículo explora diferentes maneras de involucrar a los participantes en la formación utilizando herramientas digitales.

Personalizar la experiencia de aprendizaje con herramientas digitales para involucrar a los aprendices

La relevancia de la formación es la principal fuente de compromiso para un aprendiz. Los cursos ofrecidos deben satisfacer sus necesidades personales. Deben tener un impacto inmediato en su vida para motivarlo. Así, el formador en e-learning debe definir objetivos específicos con cada aprendiz.

Además, es necesario considerar el nivel de conocimiento del aprendiz. Esto ayuda a determinar si puede revisar algunos módulos o si necesita profundizar en temas específicos. El formador debe ofrecer contenido o un camino de formación adaptado a las necesidades del participante. El aprendiz avanzará a su propio ritmo con métodos que comprende.

¿Dónde interviene el digital? A través de la inteligencia artificial, por supuesto. Es la herramienta más eficaz para implementar el aprendizaje adaptativo. El formador proporciona toda la información necesaria para que la IA recomiende cursos o contenido relevantes.

Fomentar la interacción en el aprendizaje digital

Para la formación a distancia, el formador puede elegir entre cursos sincrónicos y asincrónicos. Sin embargo, la formación sincrónica es mucho más envolvente. El formador interviene en directo mientras la audiencia interactúa a través de comentarios. Esto favorece una comunicación auténtica e inmediata. Por lo tanto, es vital formar a los formadores para la facilitación virtual.

Además de la interacción en vivo, el formador puede preparar cuestionarios y encuestas. De esta manera, recoge la retroalimentación de los aprendices sobre el contenido. Puede tratarse de una pequeña evaluación de los conocimientos adquiridos. Además, las encuestas sobre la calidad de la formación también son útiles.

La organización no debe subestimar la importancia del seguimiento en el proceso de formación. Cada aprendiz necesita un acompañamiento personalizado. De hecho, la autonomía ya es problemática en la formación tradicional. El aprendiz necesita que el formador actúe como mentor para fomentar su compromiso total.

Incluir storytelling en la formación para involucrar a los aprendices

Desde siempre, los estudiantes prestan atención cuando el formador comienza a contar una anécdota personal. Así, ciertos contenidos deben inspirar y suscitar emociones. La memoria emocional es significativamente más efectiva que otros tipos de memoria.

Para el storytelling en formato digital, el formador puede usar videos, imágenes u otros recursos visuales. Puede basarse en sus propias experiencias o en las de una persona influyente que los aprendices conozcan. Este storytelling puede formar parte del microlearning.

Crear y facilitar una comunidad

El aprendizaje social es particularmente eficaz para involucrar a los estudiantes. Los anima a compartir, interesarse por los demás y a invertir en la formación. Así, el formador puede crear un espacio colaborativo para que trabajen juntos.

La plataforma facilita las interacciones, especialmente si incluye mensajería. Los aprendices pueden realizar trabajos en grupo, bajo la supervisión discreta del tutor. También tienen libertad para hacer preguntas y comentarios.

En la práctica, los aprendices se sienten más cómodos comunicándose entre ellos que con el formador. Esto les permite profundizar en ciertos temas y compartir experiencias beneficiosas para todos. El formador actúa como facilitador y debe intervenir solo rara vez para dejar que los estudiantes se expresen.

Consejo:
Lanza temas de discusión interesantes para animar el foro. Inspírate en eventos actuales. Esto también es una manera de conocer mejor a los aprendices. En general, los debates y discusiones revelan qué les apasiona y motiva.

Retroalimentación continua y personalizada

El progreso es clave para involucrar a los aprendices. Necesitan ver que están avanzando. Con herramientas digitales, el formador puede implementar un sistema de autoevaluación. El aprendiz completa un cuestionario sobre el módulo terminado. Para motivarlos aún más, se pueden utilizar recompensas, como un sistema de puntos o medallas.

Además, la propia organización de formación debe continuar mejorando. Se debe permitir que los aprendices den retroalimentación. De esta manera, contribuyen a la formación y sienten que sus opiniones cuentan. Este sentimiento de pertenencia y consideración los motivará a comprometerse plenamente con la formación.

Bueno saber:
Utiliza herramientas digitales para crear cuestionarios instantáneos y automáticos. No hagas más de 10 preguntas por evaluación, ya que el aprendiz podría perder la paciencia. Prefiere las preguntas de opción múltiple.

Gamificar la formación para involucrar a los estudiantes

Aprender divirtiéndose es una excelente manera de involucrar a los aprendices. El formador puede incluir juegos lúdicos en el camino de formación para aligerar el ambiente. Además, se ha demostrado que los juegos son más efectivos para retener la teoría, ya que involucran conocimientos, concentración y creatividad.

La gamificación de la formación permite simular situaciones reales. Para ello, el formador puede elegir entre escenarios ramificados, juegos serios, realidad virtual, cuestionarios, etc. Puede utilizar los dispositivos móviles de los aprendices, y las organizaciones de formación mejor equipadas tienen proyectores táctiles para trabajos en grupo. Para una experiencia más inmersiva, se pueden utilizar cascos VR.

La gamificación aumenta la atractividad de la formación. A los aprendices les gustan los desafíos y disfrutan de la novedad y la exclusividad. Además, se involucrarán aún más si hay recompensas en juego.

Simplificar el acceso a la formación

En una formación digital, todo debe ser simplificado. No todos los aprendices están cómodos con las nuevas tecnologías. Por lo tanto, es importante adaptar la formación para que sea accesible para todos en todo momento. La flexibilidad de la formación digital es su principal ventaja. Deben eliminarse al máximo todas las restricciones.

Las plataformas móviles son las más valoradas para el aprendizaje digital. Sin embargo, también es importante diversificar los canales. Los ordenadores pueden ser más adecuados en algunos casos. A veces, una clase presencial puede ser mejor.

Entonces, ¿cuándo usar el digital para involucrar a los aprendices? Es cuestión de práctica y pertinencia. El formador debe identificar los conceptos que se pueden convertir. No obstante, algunos cursos deben permanecer tradicionales para asegurar una buena asimilación.

Además, el contenido del curso debe seguir disponible después de las intervenciones sincrónicas para que los aprendices puedan consultarlo de vez en cuando. Cuando se trata de revisión, cada uno tiene su propio ritmo y frecuencia.

Medir el compromiso de los participantes

Para involucrar más a los aprendices, es importante evaluar la eficacia de la formación. Para ello, la organización de formación utiliza indicadores específicos del aprendizaje digital, como la tasa de participación, el tiempo pasado en la plataforma y el tiempo de progreso.

La ventaja del aprendizaje digital es que las plataformas y software recopilan automáticamente los datos. Luego, proporcionan informes completos basados en los indicadores establecidos. El software más avanzado incluso realiza análisis integrales. Esto es un recurso valioso para la toma de decisiones.

La organización de formación debe mejorar continuamente sus ofertas. Debe ser capaz de adaptarse a la nueva tecnología y a las expectativas de los aprendices, o perderá competitividad.